Nuevos fósiles sugieren la existencia de una “Era de monotremas“
Paleontólogos australianos hallan restos fósiles del ornitorrinco más antiguo conocido hasta la fecha y de una nueva especie, denominada equidnapus, que tiene una anatomía similar a la de un ornitorrinco junto con rasgos que se asemejan más a los de un equidna.
Por Taylor & Francis
Un equipo de científicos australianos del Museo Australiano (AM), los Museos de Victoria y el Centro Australiano del Ópalo ha descubierto pruebas de la existencia de una Era de los monotremas, según revelan en Alcheringa: An Australasian Journal of Palaeontology.
Los hallazgos fueron dirigidos por dos expertos en mastozoología, la rama de la zoología dedicada al estudio de los mamíferos: el profesor Tim Flannery, del Museo Australiano; y el profesor Kris Helgen, científico jefe y director del Instituto de Investigación del Museo Australiano (AMRI).
Hablamos de unas mandíbulas opalizadas encontradas en los campos de ópalo de Lightning Ridge, en Nueva Gales del Sur, y cuya edad es de entre 102 y 96,6 millones de años.
Según el profesor Flannery, la investigación revela que hace 100 millones de años Australia era el hogar de una diversidad de monotremas, de los cuales el ornitorrinco y el equidna o hormiguero espinoso son los únicos descendientes supervivientes.
Los monotremas son endémicos de Australia, Nueva Guinea y Tasmania.
No hay que olvidar que los monotremas son un grupo de mamíferos que se caracterizan por poner huevos en lugar de dar a luz a crías vivas como hace la mayoría de los mamíferos. Son una de las tres principales ramas de mamíferos, junto con los marsupiales y los placentarios.
Los monotremas son endémicos de Australia, Nueva Guinea, Tasmania y otras islas próximas a las costas, y se componen de solo cinco especies existentes en la actualidad: el citado ornitorrinco (Ornithorhynchus anatinus) y cuatro equidnas pertenecientes a los géneros, el Tachyglossus y el Zaglossus.
"Hoy en día, Australia es conocida como una tierra de marsupiales, pero descubrir estos nuevos fósiles es la primera indicación de que anteriormente Australia fue hogar de una diversidad de monotremas— asegura el profesor Flannery. Y añade—: Es como descubrir una civilización completamente nueva”.
En palabras del profesor Helgen, las tres nuevas especies halladas muestran combinaciones de características no vistas anteriormente en otros monotremas vivos o fósiles. Uno de los monotremas nuevos más llamativos, el Opalios splendens, posee características de los monotremas conocidos más antiguos, pero también exhibe algunas que anticipan adaptaciones en los monotremas modernos, esto es, los equidnas y el ornitorrinco.
“Opalios splendens ocupa un lugar en el árbol evolutivo anterior a la evolución del antepasado común de los monotremas actuales— dice el profesor Helgen. Y añade—: Su anatomía general es quizá bastante parecida a la del ornitorrinco, pero con rasgos de la mandíbula y el hocico un poco más parecidos a los de un equidna. Por eso podríamos llamarlo equidnapus”.
“La historia de cómo evolucionaron nuestros mamíferos ponedores de huevos es de ‘dentado a desdentado’ en el monotrema más antiguo, Teinolophos trusleri, especie descrita a partir de una mandíbula de hace 130 millones de años encontrada en Flat Rocks (Victoria— explica el profesor Helgen. Y añade—: Lo que vemos en Lightning Ridge es que hace 100 millones de años algunos de los monotremas aún tenían cinco molares, pero otros solo tres”.
Cuándo y por qué los ornitorrincos adultos perdieron los dientes después de casi 100 millones de años es un misterio que los paleontólogos creen haber resuelto.
El profesor Flannery advierte de que hoy en día los equidnas no tienen dientes y de que los ornitorrincos también carecen esencialmente de pieza dentales.
“Los ornitorrincos adultos no tienen dientes, aunque los jóvenes cuentan con unos molares rudimentarios. Cuándo y por qué los ornitorrincos adultos perdieron los dientes después de casi 100 millones de años es un misterio que creemos haber resuelto— comenta este mastozoologo. Y continúa—: Puede que fuera la competencia con la rata de agua australiana, que llegó a Australia en los últimos dos millones de años, lo que hizo que los ornitorrincos buscaran alimentos más blandos y resbaladizos que se procesan mejor con las placas córneas con las que muelen la comida los ejemplares adultos”.
"Lo que resulta inusual en esta historia exclusivamente australiana es que en una instantánea vemos seis mamíferos ponedores de huevos diferentes viviendo juntos en Lightning Ridge hace más de 100 millones de años— cuenta el profesor Flannery. Y continúa—: Todos ellos tienen destinos evolutivos potenciales que pueden tomar diferentes direcciones, y todos ellos son ancestros lejanos y parientes de los monotremas vivos actuales".
Matthew McCurry, curador de Paleontología del Museo Australiano, afirma que el descubrimiento de tres nuevos géneros de monotremas ayuda a reconstruir su notable historia evolutiva.
Una historia evolutiva que encaja a la perfección.
“Hay seis especies de monotremas, incluidas las tres recién descritas aquí, en la fauna del Cenomaniense de Lightning Ridge de Nueva Gales del Sur, lo que la convierte en el conjunto de monotremas más diverso del que se tiene constancia— afirma McCurry. Y añade—: Cuatro especies se conocen a partir de un único espécimen, lo que sugiere que la diversidad sigue estando infrarrepresentada. Este descubrimiento añade más de un 20% a la diversidad de monotremas conocida hasta ahora".
En palabras de este paleontólogo, hay pocos fósiles de monotremas, por lo que encontrar nuevos restos puede aportar nueva información acerca de dónde vivían, qué aspecto tenían y cómo influyeron los cambios en el medio ambiente en su evolución. “Todos los fósiles significativos de monotremas conocidos actualmente encajan en esta historia evolutiva, desde Teinolophos, la diminuta criatura parecida a una musaraña de la Antártida de hace 130 millones de años, hasta nuestros días", dice McCurry.
"El ornitorrinco y el equidna son especies icónicas de Australia. El descubrimiento de estas varias nuevas especies en una pequeña área sugiere que el árbol genealógico de los monotremas que ponen huevos es mucho más complicado de lo que sugieren solo el ornitorrinco y el equidna vivos", dice Thomas Rich, curador de Paleontología de Vertebrados en el Instituto de Investigación del Museo Victoria.
"A medida que continúa el trabajo de campo en el Mesozoico de Australia, seguimos aumentando nuestra comprensión de cómo cambió la vida con el tiempo. Esto, para mí, es lo que hace que la ciencia sea tan emocionante", confiesa Patricia Vickers-Rich, paleontóloga del Instituto de Investigación del Museo Victoria.
"Los fósiles de ópalo son raros, pero los fósiles de monotremas opalizados son infinitamente más raros, ya que hay un fragmento de monotrema por cada millón de otras piezas fósiles. No sabemos cuándo ni exactamente dónde aparecerán", explica Smith.
Los fósiles de ópalo son restos fosilizados de organismos que han sido reemplazados por ópalo, una gema mineraloide compuesta principalmente de sílice hidratada.
"Estos especímenes son una revelación. Muestran al mundo que mucho antes de que Australia se convirtiera en la tierra de mamíferos marsupiales, esta era una tierra de ponedores de huevos peludos: monotremas— dice Smith. Y concluye: Parece que hace 100 millones de años había más monotremas en Lightning Ridge que en cualquier otro lugar de la Tierra, pasado o presente”.
Información facilitada por Taylor & Francis -Adaptación: Enrique Coperías / Rexmolón Producciones