La interocepción: el secreto del orgasmo femenino

Un equipo de psicólogos afirma haber descubierto una pieza clave del clímax femenino gracias a un estudio pionero.

Enrique Coperías

Las mujeres que se fijan y atienden a las señales corporales internas, como los latidos del corazón, la respiración y las sensaciones táctiles sensuales, disfrutan de orgasmos con mayor frecuencia.

Las mujeres que se fijan y atienden a las señales corporales internas, como los latidos del corazón, la respiración y las sensaciones táctiles sensuales, disfrutan de orgasmos con mayor frecuencia. Cortesía: Vika_Glitter

Un grupo de investigadores dirigidos por expertos de la Universidad de Essex, en el Reino Unido, han descubierto que las mujeres alcanzan el clímax con más frecuencia si tienen altos niveles de un sentido interno conocido como interocepción.

La interocepción es la capacidad del cuerpo para percibir, interpretar y responder a las señales internas provenientes de los órganos y sistemas internos, como el corazón, los pulmones, el estómago, los músculos y el sistema gastrointestinal. Estas señales incluyen aspectos como el hambre, la sed, el dolor, la necesidad de respirar, la regulación de la temperatura corporal y el ritmo cardíaco. A través de la interocepción, las personas son capaces de tomar conciencia de su estado interior y responder a las necesidades fisiológicas de su cuerpo.

Las funciones interoceptivas abarcan tres dimensiones principales: la precisión interoceptiva, que se refiere a la habilidad objetiva para detectar las señales corporales internas; la sensibilidad interoceptiva, que implica la percepción subjetiva de dichas señales, es decir, cómo se experimentan internamente; y la conciencia interoceptiva, que consiste en la congruencia entre la detección objetiva y la percepción subjetiva, reflejando un alineamiento entre lo que el cuerpo siente y cómo se interpreta mentalmente.

Un déficit en la interocepción puede estar asociado con trastornos como la ansiedad y la depresión

Esta capacidad orgánica está mediada por un sistema complejo de receptores sensoriales y vías nerviosas que transmiten información al cerebro, específicamente a áreas como la ínsula y la corteza somatosensorial, que integran estas señales para generar una percepción consciente.

Este terceto de dimensiones trabajan en conjunto para facilitar una conexión integral entre el cuerpo y la mente, y desempeña un papel esencial en la regulación emocional, el bienestar general y la autoconciencia. Todo ello juega un papel fundamental en el bienestar físico y emocional, ya que influye en procesos como la regulación emocional, la toma de decisiones y la autoconciencia.

Por ejemplo, un déficit en la interocepción puede estar asociado con trastornos como la ansiedad, la depresión o los trastornos alimenticios, mientras que una interocepción mejorada puede contribuir a un manejo del estrés más eficiente y una mayor conexión mente-cuerpo.

Las mujeres participantes en el estudio alcanzaban el orgasmo con un 20 % más de frecuencia cuando se masturbaban.

Las mujeres participantes en el estudio alcanzaban el orgasmo con un 20 % más de frecuencia cuando se masturbaban. Cortesía: Vika_Glitter

¡Atentas a las señales internas!

Pues bien, Megan Klabunde, del Departamento de Psicología de la Universidad de Essex, ha desentrañado un nexo entre el orgasmos en la mujer y la interocepción. Klabunde ha descubierto que las mujeres que se fijan y atienden a las señales corporales internas, como los latidos del corazón, la respiración y las sensaciones táctiles sensuales, disfrutan de orgasmos con mayor frecuencia.

La doctora Klabunde afirma que es la primera vez que se estudian los orgasmos femeninos saludables, esto, es que ocurren como parte de una respuesta sexual normal y sin interferencias, condiciones médicas, estrés o factores psicológicos que puedan dificultar su experiencia, y que «son importantes para el bienestar de la mujer y aumentan la satisfacción en las relaciones eróticas».

La doctora Klabunde y su equipo tiene la esperanza de que los resultados de este estudio, publicado en la revista Brain Sciences, puedan ayudar a mejorar la vida de las mujeres —y de sus parejas— en todo el mundo.

Barreras para alcanzar el clímax

Hay que decir que la experiencia sexual, el disfrute en pareja y la capacidad de la mujer para alcanzar el orgasmo pueden estar influenciados por diversos factores, incluidos aspectos fisiológicos. En algunos casos, factores psicológicos y personales, condiciones anatómicas específicas, como un clítoris oculto por su capuchón y la dispareunia o dolor durante las relaciones sexuales, o alteraciones hormonales pueden impactar en la capacidad para alcanzar el clímax.

Es lo que los especialistas denominan trastorno orgásmico femenino, también conocido como anorgasmia, una disfunción sexual que según algunos estudios podría afectar a entre un 5% y un 40% de las mujeres. Se estima que alrededor de un 11%-22% de las mujeres no han alcanzado jamás un orgasmo.

Nuestro estudio demuestra empíricamente que las mujeres necesitan salir de su cabeza y entrar en su cuerpo para tener orgasmos más frecuentes y satisfactorios. Y lo son cuando la mujer es capaz de concentrarse en lo que siente su cuerpo.
— Megan Klabunde, psicóloga de la Universidad de Essex

En palabras de la doctora Klabunde, «este estudio es importante porque la mayoría de las investigaciones sobre el orgasmo en la mujer se han focalizado en su disfunción. Centrarse únicamente en las disfunciones orgásmicas de la mujer es un problema, porque hay muy pocos estudios que demuestren el proceso normal del orgasmo femenino, por no hablar de las formas en que la mujer puede enriquecer sus orgasmos».

Una mejor comprensión del proceso neuropsicológico hacia el clímax femenino podría conducir a un mayor bienestar de las mujeres, además de impulsar la satisfacción de la relación para ellas y sus parejas, según esta psicóloga.

Éxito con la masturbación

En el estudio de la doctora Klabunde y sus colegas participaron 360 mujeres, que rellenaron cuestionarios sobre sus experiencias sexuales y sus niveles de interocepción. Los investigadores les preguntaron tanto sobre los encuentros en solitario como en pareja, y descubrieron que las mujeres alcanzaban el orgasmo con un 20 % más de frecuencia cuando se masturbaban, con índices similares de satisfacción a cuando practicaban sexo con alguien.

«Nuestro estudio indica que la brecha del orgasmo no ocurre necesariamente porque las mujeres no puedan alcanzarlo, sino que nuestros hallazgos demuestran que el orgasmo es más difícil y menos satisfactorio para las mujeres en contextos de pareja», dicen los autores del estudio en el artículo.

El equipo de investigación de la doctora Klabunde también se topó con que los altos niveles de interocepción estaban relacionados con el grado de satisfacción de los orgasmos.

Se necesitan más estudios

«La capacidad de las mujeres para centrar su atención en sus sensaciones corporales internas, y confiar en estas sensaciones, también se asoció con una mayor satisfacción en la experiencia orgásmica», asegura la doctora Klabunde en una nota de prensa de la universidad.

Por lo tanto, es importante que las mujeres y sus parejas confíen en las experiencias corporales internas de la mujer durante los encuentros eróticos. «Esto es fundamental para fomentar la satisfacción orgásmica tanto en solitario como, sobre todo, en contextos sexuales en pareja», concluye la doctora Klabunde, que advierte de que los hallazgos mencionados incluyen algunas limitaciones notables.

«Entre ellas, se incluye el hecho de que un gran número de nuestras participantes respondieron a nuestra encuesta desde foros web feministas, lo que podría introducir sesgos en nuestra muestra de estudio», podemos leer en el artículo. «Los estudios futuros deberían replicar nuestro estudio en muestras que incluyan grupos de mujeres que no se identifican como feministas».▪️

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