Cómo un buen desayuno protege el corazón
Tomar un desayuno de calidad, que aporte entre el 20 % y el 30% del aporte energético diario reduce el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, afirma un nuevo estudio.
Por Enrique Coperías
Tomar un desayuno de calidad que aporte la cantidad adecuada de energía para afrontar el día, en torno a una cuarta parte de la ingesta diaria, reduce el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares que afectan al corazón y los vasos sanguíneos. Así lo pone de manifiesto un estudio del Instituto de Investigaciones Médicas Hospital del Mar, en Barcelona, que ha sido publicado en el Journal of Nutrition, Healt and Aging.
El estudio ha seguido la evolución durante tres años de 383 participantes en el proyecto PREDIMED-Plus, un ensayo clínico aleatorizado que comparaba los efectos de una dieta mediterránea combinada con actividad física frente a las recomendaciones dietéticas por sí solas sobre las enfermedades cardiovasculares, como la angina de pecho, el infarto de miocardio, el ictus, la insuficiencia cardíaca y la enfermedad cardíaca hipertensiva.
Ningún estudio anterior había analizado el impacto de la ingesta energética y la calidad nutricional del desayuno sobre estos factores de riesgo. caridovascular.
Una ingesta matinal adecuada
Este nuevo trabajo consideró dos aspectos fundamentales. En primer lugar, evaluó la proporción de la ingesta energética del desayuno respecto al consumo calórico total diario, diferenciando entre una ingesta adecuada (20%-30% del total diario) y otros niveles menos equilibrados.
En segundo lugar, los investigadores analizaron los efectos de un desayuno de alta calidad, caracterizado por un equilibrio adecuado de proteínas, grasas, fibra y otros nutrientes esenciales. Los hallazgos revelaron que consumir una cantidad saludable de energía durante la mañana, acompañada de alimentos de alta calidad, contribuye significativamente a la reducción de los factores de riesgo cardiovascular.
Un buen desayuno reduce los kilos de más
El estudio realizó un seguimiento exhaustivo de los participantes durante un periodo de tres años. Los sujetos, de entre 55 y 75 años, presentaban sobrepeso u obesidad. Durante la investigación, se evaluaron diversos factores de riesgo cardiovascular, como el peso corporal, el perímetro de la cintura (indicador clave de obesidad abdominal), los niveles de colesterol y triglicéridos del perfil lipídico, la presión arterial y marcadores relacionados con la diabetes.
Los resultados revelaron que los participantes cuya ingesta energética matutina representaba entre el 20% y el 30% de su consumo calórico diario lograron mejoras significativas en varios indicadores de riesgo cardiovascular. En particular, mostraron una evolución más favorable del peso corporal en comparación con quienes consumían una proporción mayor o menor de energía en el desayuno.
Al término del estudio, estos participantes presentaron un índice de masa corporal entre un 2% y un 3,5% más bajo, así como una reducción del perímetro de la cintura de entre un 2%y un 4%. Además, este patrón de consumo se asoció con niveles significativamente menores de triglicéridos (reducción del 9% al 18%) y un aumento en los niveles de colesterol HDL, también conocido como colesterol bueno (incremento del 4% al 8,5%). Otros marcadores mostraron cambios más modestos, aunque en la misma dirección positiva.
¿Qué es un desayuno de calidad?
En relación con la calidad del desayuno, las cifras también eran positivas. Los participantes que siguieron un desayuno de calidad presentaban menos obesidad abdominal al final del seguimiento, un 1,5% menos de perímetro de cintura, menos triglicéridos —un 4% menos— y más colesterol bueno —un 3% más—.
Un desayuno de calidad es aquél que lleva la cantidad adecuada de proteínas y de grasas de alto valor biológico, así como fibra y otros minerales y elementos, como el potasio y el hierro, pero sin un exceso de azúcares añadidos y de grasas saturadas.
Esto indica que «el desayuno es la comida más importante del día, pero importa el qué y cómo se hace, comer cantidades controladas, ni demasiado, ni demasiado poco, y su composición nutriciona —dice Álvaro Hernáez, investigador del Instituto de Investigación del Hospital del Mar, investigador del CIBER de Enfermedades Cardiovasculares (CIBERCV) y profesor de la Facultad de Ciencias de la Salud Blanquerna de la Universitat Ramon Llull. Y añade—: Nuestros datos indican que la calidad está asociada a una mejor evolución de los factores de riesgo cardiovasculares. Tan importante es desayunar como hacerlo de calidad. Importa mucho la calidad de lo que comemos».
Envejecimiento saludable
En este sentido, Montse Fitó, coordinadora del Grupo de investigación en Riesgo Cardiovascular y Nutrición del centro de investigación del Hospital del Mar y del CIBER de Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición (CIBEROBN), destaca que comer la cantidad adecuada de energía y hacer un desayuno de calidad suman para prevenir el riesgo cardiovascular.
«Hemos confirmado que las recomendaciones dietéticas sobre la calidad de lo que se come han sido efectivas, a nivel de evolución de los factores de riesgo a lo largo del tiempo en adultos con alto riesgo cardiovascular», asegura la doctora Fitó.
Los resultados del trabajo están ajustados de manera que son atribuibles tanto a la ingesta de energía durante el desayuno como a la calidad de los alimentos que se comen y no a otros factores. «Promover unos hábitos de desayunar saludable puede contribuir a un envejecimiento saludable al reducir el riesgo de síndrome metabólico y las enfermedades crónicas que se asocian, mejorando así la calidad de vida», comenta Karla-Alejandra Pérez-Vega, investigadora del Hospital del Mar y del Centro de Investigación Biomédica en Red de la Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición (CIBEROBN). ▪️
Información facilitada por el Instituto de Investigaciones Médicas Hospital del Mar
Fuente: Karla-Alejandra Pérez-Vega, Camille Lassale, María-Dolores Zomeño, Olga Castañer, Jordi Salas-Salvadó, F. Javier Basterra-Gortari, Dolores Corella, Ramón Estruch, Emilio Ros, Francisco J. Tinahones, Gemma Blanchart, Mireia Malcampo, Daniel Muñoz-Aguayo, Helmut Schröder, Montserrat Fitó, Álvaro Hernáez. Breakfast energy intake and dietary quality and trajectories of cardiometabolic risk factors in older adults. The Journal of nutrition, health and aging (2024). DOI: https://doi.org/10.1016/j.jnha.2024.100406.