Descubren un exoplaneta gigante con una órbita extrema alrededor de una estrella cercana
Astrónomos israelíes han descubierto GJ 2126 b, un exoplaneta gigante con una órbita tan excéntrica que desafía las teorías actuales de formación planetaria. Su inusual trayectoria alrededor de una estrella enana de tipo M podría revelar secretos clave sobre la evolución de mundos lejanos.
Por Enrique Coperías
Los astrónomos acaban de descubrir un exoplaneta que dibuja una órbita muy excéntrica alrededor de su estrella anfitriona, GJ 2126, que se encuentra a unos 124 años luz de la Tierra. Imagen generada con Grok
Astrónomos israelíes acaban de anunciar el descubrimiento de GJ 2126 b, un exoplaneta similar a Júpiter con una órbita altamente excéntrica. Este planeta completa una órbita alrededor de su estrella anfitriona cada 272,7 días y se encuentra a una distancia media de 106 millones de kilómetros.
Lo que hace a GJ 2126 b especialmente interesante es que se trata de uno de los exoplanetas más excéntricos descubiertos hasta la fecha alrededor de una estrella enana de tipo M —una estrella pequeña, fría y de baja masa—, lo que lo convierte en un objeto clave para entender los procesos de formación y evolución planetaria.
El hallazgo se anunció en un artículo publicado en el servidor de prepublicaciones arXiv. El equipo, dirigido por Arbel Schorr, de la Universidad de Tel Aviv, en Israel, utilizó datos del espectrógrafo HARPS (High Accuracy Radial velocity Planet Searcher), uno de los instrumentos más exitosos en la detección de exoplanetas.
Cazado por su velocidad radial
Instalado en el telescopio de 3,6 metros del Observatorio Europeo Austral (ESO), en La Silla (Chile), HARPS posee una precisión de velocidad radial de aproximadamente 1 m/s, lo que lo convierte en una herramienta eficaz para detectar planetas mediante el método de velocidad radial.
Este método de detección se basa en medir pequeñas variaciones en la velocidad de la estrella causadas por la atracción gravitacional de un planeta. Gracias a esta técnica, se han descubierto más de seiscientos exoplanetas.
En el caso de GJ 2126 b, el planeta fue detectado y caracterizado utilizando 112 mediciones de velocidad radial extraídas de la base de datos HARPS-RVBank, que contiene más de 250.000 mediciones correspondientes a 5.239 estrellas.
Un nuevo exoplaneta, sin lugar a dudas
Esta base de datos incluye todos los espectros estelares obtenidos por HARPS antes de enero de 2022, lo que permite a los astrónomos confirmar o descubrir nuevos candidatos planetarios.
El análisis de los datos se complementó utilizando dos herramientas clave: el periodograma Generalized Lomb-Scargle (GLS), ampliamente utilizado por su eficiencia computacional; y el periodograma de correlación de distancia de fase (PDC), diseñado para detectar señales no sinusoidales, como las de órbitas excéntricas.
Ambos métodos detectaron un pico prominente en el período de 273 días, confirmando así la presencia del exoplaneta.
El exoplaneta GJ 2126 b posee una masa mínima estimada de 1,3 veces la de Júpiter, y su alta excentricidad plantea interrogantes sobre los procesos que podrían haber dado lugar a su órbita extrema. Crédito: Unsplash/CC0 Public Domain
La estrella anfitriona GJ 2126 tiene 0,73 radios solares
Además, se analizaron indicadores de actividad estelar para descartar que las señales observadas se debieran a fenómenos estelares. Estos incluyeron el ancho a media altura del perfil de correlación cruzada (CCF), el índice cromático y emisiones en líneas Hα y NaD. Ninguno de estos indicadores mostró correlación con las señales detectadas, lo que reforzó la hipótesis de que se trataba de un planeta.
En cuanto a las características del sistema, GJ 2126 es una estrella enana de alta velocidad propia, esto es, que se mueve rápidamente a través del cielo en relación con otras estrellas, desde el punto de vista de la Tierra, y del tipo espectral M0V.
La estrella tiene un radio aproximado de 0,73 radios solares, una masa de 0,65 masas solares y una temperatura efectiva de 4.159 K. Se encuentra a unos 124 años luz de la Tierra, y presenta una metalicidad de 0,6 dex, un factor relevante dado que se ha observado que la presencia de metales influye en la formación de planetas gigantes.
El enigma de su órbita extrema
El exoplaneta GJ 2126 b posee una masa mínima estimada de 1,3 veces la de Júpiter, y su alta excentricidad plantea interrogantes sobre los procesos que podrían haber dado lugar a su órbita extrema. Las teorías actuales sugieren varios escenarios. Una de ellas es el llamado efecto Lidov-Kozai, donde un compañero masivo distante induce oscilaciones en la inclinación y excentricidad de la órbita del planeta. Otra hipótesis es la influencia de un encuentro cercano con otra estrella, aunque esta posibilidad se considera poco probable.
La explicación más convincente es que GJ 2126 b adquirió su alta excentricidad a través de interacciones gravitacionales con otros planetas durante las primeras etapas del sistema. Este proceso, conocido como dispersión planetaria, se ha propuesto anteriormente para explicar la formación de Júpiteres calientes, planetas gigantes que orbitan muy cerca de sus estrellas.
El descubrimiento de GJ 2126 b es especialmente relevante porque amplía el catálogo de exoplanetas con órbitas altamente excéntricas alrededor de estrellas de baja masa. Estos sistemas planetarios ofrecen pistas clave sobre la habitabilidad de planetas en entornos extremos y plantean nuevos desafíos a las teorías de formación planetaria. ▪️
Fuente: A. Schorr. A. Binnenfeld and S. Zucker. GJ 2126 b: A highly eccentric Jovian exoplanet. arXiv (2025). DOI:
https://doi.org/10.48550/arXiv.2502.11139