Un reptil volador prehistórico gigante despegaba con un método similar al que usan los murciélagos

Los pterosaurios, que llegaban a pesar decenas de kilos y alcanzaban envergaduras de más de diez metros, quizá usaban las cuatro extremidades para impulsarse en el aire, como hacen los murciélagos hoy en día, según apunta un nuevo estudio.

Por la Universidad de Bristol

Tupandactylus es un género de pterosaurio pterodactiloide del Cretácico Inferior. Modelo creado por Susanne Henßen

Los hallazgos, publicados en PeerJ, aportan nuevos conocimientos sobre cómo los pterosaurios conseguían emprender el vuelo a pesar de alcanzar tamaños muy superiores a los de los animales modernos. La investigación arroja nueva luz sobre la capacidad de salto para iniciar el vuelo de estos animales, algunos de los cuales tenían alas de más de diez metros de envergadura.

Los pterosaurios eran reptiles voladores que vivieron durante la era Mesozoica, concretamente en los periodos Triásico, Jurásico y Cretácico, hace entre 228 y 66 millones de años. Aunque a menudo se les confunde con dinosaurios, en realidad son un grupo distinto de reptiles voladores.

Los pterosaurios evolucionaron a lo largo de millones de años y desarrollaron una amplia gama de formas y tamaños. Algunos eran relativamente pequeños, del tamaño de un pajarillo, mientras que otros, como el Quetzalcoatlus, podían alcanzar envergaduras de hasta doce metros o más. Estaban adaptados para el vuelo, con alas formadas por una membrana de piel estirada entre un dedo largo de la mano y el cuerpo. La estructura ósea de sus alas exteriores, desde la punta hasta el codo, estaba reforzada por fibras poco espaciadas llamadas actinofibrillas.

¿Cómo volaban los pterosaurios?

La mecánica del vuelo de estos reptiles alados es motivo de polémica entre los paleontólogos. Tanto es así que el científico japonés Katsufumi Sato hizo cálculos usando a las aves modernas y concluyó que era imposible para un pterosaurio permanecer en el aire. Pero el hecho es que volaban, y todo apunta a que muy bien.

También existen importantes lagunas en cómo se las ingeniaban para despegar. Los científicos saben que poseían potentes músculos de vuelo, y que usaban esos mismos músculos para caminar como cuadrúpedos. Tanto es así que Mark Witton y Mike Habib, de la Universidades de Portsmouth y de Johns Hopkins, respectivamente , afirman que los pterosaurios usaban un mecanismo de salto usando sus propias alas para alcanzar el vuelo. Esta hipótesis venía a contradecir aquella que aseguraba que esperaban a las corrientes de aire cálidas o usaban riscos para impulsarse.

Una vez en el aire, los pterosaurios podían alcanzar velocidades de más de 120 km/h y completar distancias kilométricas., según algunos paleontólogos.

Una pareja de Quetzalcoatlus surca los cielos del Cretácico Superior, en Norteamérica.

Una pareja de Quetzalcoatlus surca los cielos del Cretácico Superior, en Norteamérica. Estos pterosaurios medían más de diez metros de envergadura y se estima que pesaban entre 70 y 250 kilos. Imagen generada con DALL-E

El nuevo estudio pone a prueba la hipótesis de Witton y Mike Habib. El trabajo, realizado por científicos de la Universidad de Bristol, la Universidad John Moores de Liverpool, la Universidad Federal del ABC y la Universidad de Keele, es la continuación de años de análisis y modelización de cómo los músculos interactúan con los huesos para crear movimiento en diversos animales. Y ahora es el momento, según ellos, de intentar responder a la pregunta de cómo consiguieron despegar los mayores animales voladores que han pisado la Tierra.

El equipo creó el primer modelo informático para este tipo de análisis de un pterosaurio con el fin de probar tres formas distintas en las que estos reptiles podrían haber despegado: un salto vertical en ráfaga, utilizando solo las patas, como al que recurren principalmente las aves que viven en el suelo; un salto menos vertical, utilizando solo las patas, pero en esta caso más similar al salto que practican las aves que vuelan con frecuencia; y un salto con las cuatro extremidades, echando mano también de sus alas en un movimiento, parecido al salto de despegue de un murciélago.

Simulando estos tres tipos de movimiento diferentes, los investigadores pretendían comprender la fuerza de palanca disponible para impulsar al animal en el aire.

Usaban las cuatro extremidades para despegar

"Los animales de mayor tamaño tienen que superar mayores retos para volar, por lo que la capacidad de animales tan grandes como los pterosaurios para hacerlo resulta especialmente fascinante —dice Ben Griffin, autor principal del estudio. Y añade—: "A diferencia de las aves, que se apoyan principalmente en sus extremidades posteriores, nuestros modelos indican que era más probable que los pterosaurios se apoyaran en sus cuatro extremidades para impulsarse en el aire".

Este estudio examina una de las cuestiones pendientes desde hace tiempo sobre la biomecánica subyacente del pterosaurio. Esta investigación no solo mejora la comprensión de la biología de los pterosaurios, sino que también proporciona una visión más amplia de los límites y la dinámica del vuelo en animales de gran tamaño. Al comparar a los pterosaurios con las aves y los murciélagos modernos, el estudio pone de relieve las notables soluciones evolutivas al reto del vuelo propulsado.▪️

Secuencias de despegue de un pterosaurio analizadas en el estudio.

Secuencias de despegue de un pterosaurio analizadas en el estudio. (A) Despegue bípedo estilo ráfaga con agachado, tobillo levantado y tiempos de fase de lanzamiento resaltados. (B) Despegue bípedo de estilo contramovimiento con tiempos de contramovimiento y fase de lanzamiento resaltados. (C) Estilo de despegue cuadrúpedo con las fases de agacharse, saltar y despegue resaltadas. Crédito: PeerJ (2024). DOI: 10.7717/peerj.17678

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