Un planeta alienígena soporta vientos que soplan a ¡33.000 kilómetros por hora!

Las observaciones de WASP-127b, un exoplaneta gaseoso gigante a más de 500 años luz de la Tierra, sugieren que es azotado por vientos supersónicos extremos.

Por Enrique Coperías

En esta imagen artística de WASP-127b, un gigante gaseoso a 520 años luz de la Tierra, se muestran los vientos supersónicos de 33,000 km/h moviéndose alrededor de su ecuador, el chorro de corriente más rápido jamás medido.

En esta imagen artística de WASP-127b, un gigante gaseoso a 520 años luz de la Tierra, se muestran los vientos supersónicos de 33,000 km/h moviéndose alrededor de su ecuador, el chorro de corriente más rápido jamás medido. Cortesía: ESO / L. Calçada

Un equipo internacional de astrónomos ha descubierto vientos extremadamente potentes azotando el ecuador de WASP-127b, un exoplaneta gaseoso gigante ubicado a más de 500 años luz de la Tierra.

Utilizando el Very Large Telescope (VLT) del Observatorio Europeo Austral (ESO) en Chile, los investigadores han detectado vientos supersónicos que alcanzan velocidades de hasta 33.000 km/h o, lo que es lo mismo, 9 km/s. Esto lo convierte en el chorro de corriente más rápido jamás medido en un planeta. Todo un récord.

«Parte de la atmósfera de este planeta se mueve hacia nosotros a gran velocidad, mientras que otra parte se aleja de nosotros a la misma velocidad —explica Lisa Nortmann, científica de la Universidad de Göttingen (Alemania) y autora principal del estudio, en un comunicado del European Southern Observatory (ESO). Y añade—: Este fenómeno revela la existencia de un chorro de viento supersónico extremadamente rápido en el ecuador del planeta».

Estudio de la dinámica atmosférica en exomundos

Los resultados, publicados en la revista Astronomy & Astrophysics, revelan también patrones climáticos complejos en WASP-127b. Además de los vientos extremadamente rápidos en el ecuador, el equipo descubrió que los polos del planeta son más fríos que otras áreas y notaron diferencias sutiles de temperatura entre los lados matutino y vespertino.

«Este descubrimiento nos proporciona una visión sin precedentes de los fenómenos atmosféricos en un exoplaneta distante —dice Fei Yan, coautor del estudio y profesor de la Universidad de Ciencia y Tecnología de China. Y continúa—: Es un paso importante hacia la comprensión de la dinámica atmosférica en mundos más allá de nuestro sistema solar».

El equipo utilizó el instrumento CRIRES+ en el VLT del ESO para cartografiar el clima y la composición atmosférica de WASP-127b, lo que le ha permitido confirmar la presencia de moléculas de vapor de agua y monóxido de carbono. La velocidad inusual del material atmosférico, observada como un doble pico durante el rastreo, sugiere la presencia de intensos chorros de corrientes de viento alrededor del ecuador del planeta.

Animación de los chorros de viento supersónicos en el gigante gaseoso WASP-127b.

"Estos avances nos permiten explorar mecanismos fundamentales como la redistribución del calor y los procesos químicos en exoplanetas, lo que mejora nuestra comprensión de cómo se forman estos mundos y arroja en teoría luz sobre los orígenes del Sistema Solar», señala David Cont, coautor del artículo y científico de la Universidad Ludwig Maximilian de Múnich (Alemania).

El futuro de la investigación de exoplanetas parece prometedor con el desarrollo del Extremely Large Telescope del ESO y su instrumento ANDES, que se espera permitan estudiar con mayor detalle los patrones climáticos de planetas distantes, incluyendo posiblemente planetas rocosos más pequeños en el futuro cercano. ▪️

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