¿Qué hace que la orina sea amarilla? Científicos descubren la enzima responsable
El hallazgo podría arrojar luz sobre futuros estudios de la salud intestinal y la enfermedad inflamatoria intestinal.
Por Emily C. Nunez
Investigadores de la Universidad de Maryland (UMD) y de los Institutos Nacionales de Salud estadounidenses han identificado la enzima responsable de que la orina adquiera una tonalidad amarilla, y es algo más que una curiosidad o una risita de alumnos de primaria.
La enzima microbiana conocida como bilirrubina reductasa ha sido presentada en un estudio publicado en la revista Nature Microbiology, lo que allana el camino para nuevas investigaciones sobre el papel del microbioma intestinal en dolencias como la ictericia y la enfermedad inflamatoria intestinal.
"Es sorprendente que un fenómeno biológico cotidiano haya permanecido sin explicación durante tanto tiempo, y nuestro equipo está encantado de poder explicarlo", afirma Brantley Hall, autor principal y profesor del Departamento de Biología Celular y Genética Molecular de la UMD.
Cuando los glóbulos rojos se degradan tras su vida útil de seis meses, se produce como subproducto un pigmento de color naranja brillante llamado bilirrubina. Esta suele secretarse en el intestino, donde se destina a la excreción, pero también puede reabsorberse parcialmente. Un exceso de reabsorción puede provocar una acumulación de bilirrubina en la sangre y causar ictericia, una afección que provoca el color amarillento de la piel y los ojos. Una vez en el intestino, los microorganismos residentes en esta víscera pueden convertir la bilirrubina en otras moléculas.
“Los microorganismo intestinales sintetizan la enzima bilirrubina reductasa, que convierte la bilirrubina en un subproducto incoloro llamado urobilinógeno —dice Hall. Y añade —: A continuación, el urobilinógeno se degrada espontáneamente en una molécula llamada urobilina, que es la responsable del color amarillo que todos conocemos".
La urobilina se ha relacionado durante mucho tiempo con el tono amarillo de la orina, pero el descubrimiento por parte del equipo de investigación de la enzima a la que puede atribuirse la urobilina responde a una pregunta que ha eludido a los científicos durante más de un siglo.
Además de resolver un misterio científico, estos hallazgos podrían tener importantes implicaciones para la salud. El equipo de investigadores descubrió que la bilirrubina reductasa está presente en casi todos los adultos sanos, pero suele faltar en los recién nacidos y en los individuos con enfermedad inflamatoria intestinal. Su hipótesis es que la ausencia de bilirrubina reductasa puede contribuir a la ictericia infantil y a la formación de cálculos biliares pigmentados.
"Ahora que hemos identificado esta enzima, podemos empezar a investigar cómo influyen las bacterias de nuestro intestino en los niveles circulantes de bilirrubina y en los trastornos de salud relacionados, como la ictericia", afirma Xiaofang Jiang, coautor del estudio e investigador de los NIH. Y continúa: "Este descubrimiento sienta las bases para comprender el eje intestino-hígado".
Además de la ictericia y la enfermedad inflamatoria intestinal, el microbioma intestinal se ha relacionado con diversas enfermedades y afecciones, desde alergias hasta artritis y psoriasis. Este último descubrimiento acerca a los investigadores a una comprensión holística del papel del microbioma intestinal en la salud humana.
Información facilitada por la Universidad de Maryland
Fuente: Hall, B., Levy, S., Dufault-Thompson, K. et al. BilR is a gut microbial enzyme that reduces bilirubin to urobilinogen. Nature Microbiol ogy (2024). DOI: https://doi.org/10.1038/s41564-023-01549-x