¿Por qué los noctámbulos tienen más riesgo de depresión?

Un estudio con estudiantes sugiere que las diferencias en la atención plena, los hábitos de sueño y el consumo de alcohol podrían ayudar a explicar las tasas más altas de depresión entre los noctámbulos o búhos.

Por Enrique Coperías

Las personas que prefieren realizar sus actividades por la tarde o noche, conocidas como vespertinos, nocturnos o búhos, tienen un mayor riesgo de experimentar síntomas depresivos que las alondras o cronotipo matutino.

Las personas que prefieren realizar sus actividades por la tarde o noche, conocidas como vespertinos, nocturnos o búhos, tienen un mayor riesgo de experimentar síntomas depresivos que las alondras o cronotipo matutino. Esta relación se explica en gran parte por la mala calidad del sueño, los bajos niveles de mindfulness y el consumo de alcohol. Foto: Max Okhrimenko

Un estudio publicado en la revista PLOS One, liderado por Simon Evans de la Universidad de Surrey, en el Reino Unido, ha revelado que la atención plena (mindfulness), la calidad del sueño y el consumo de alcohol pueden ayudar a explicar por qué las personas con un cronotipo vespertino (aquellos que se acuestan y despiertan más tarde) o búhos tienen un mayor riesgo de depresión en comparación con los madrugadores o alondras.

Este hallazgo es particularmente relevante, ya que la depresión en adultos jóvenes es una preocupación creciente, y comprender sus factores de riesgo podría permitir el desarrollo de intervenciones efectivas. Según el Barómetro Juvenil 2023. Salud y Bienestar de la Fundación Mutua Madrileña y Fad Juventud, el 59,3% de los jóvenes de entre 15 y 29 años manifestó haber experimentado algún problema de salud mental en el último año, incluida la depresión, en comparación con el 28,4% registrado en 2017.

Investigaciones anteriores ya habían establecido una relación entre el cronotipo vespertino y un mayor riesgo de padecer síntomas depresivos. Sin embargo, los mecanismos que explican esta asociación no estaban del todo claros. Para explorar esta cuestión, Evans y su equipo realizaron un estudio transversal con 546 estudiantes universitarios que completaron un cuestionario on line. Este permitía evaluar sus patrones de sueño, niveles de mindfulness, tendencias a la rumiación, consumo de alcohol y síntomas de depresión y ansiedad.

Sueño, atención plena y alcohol

Los resultados confirmaron que los individuos con cronotipo vespertino presentaban significativamente más síntomas depresivos en comparación con aquellos con cronotipo matutino —alondras— o intermedio.

Evans y sus colegas se toparon con que esta relación podía explicarse por diferencias en tres factores clave: la calidad del sueño, el nivel de mindfulness y el consumo de alcohol. En promedio, los participantes con cronotipo vespertino dormían peor, bebían más alcohol y actuaban con menos conciencia plena en comparación con los madrugadores.

El análisis de mediación mostró que la relación entre el cronotipo vespertino y los síntomas depresivos estaba completamente mediada por estos factores. La calidad del sueño fue el mediador más influyente, seguido por la capacidad de actuar con conciencia plena y la tendencia a describir experiencias y emociones.

Por su parte, el consumo de alcohol también jugó un cierto papel, aunque en este estudio tuvo un efecto protector moderado, lo que sugiere que el consumo de bebidas alcohólicas en cantidades moderadas dentro de entornos sociales podría tener un impacto positivo en la salud mental de algunos jóvenes.

Factores clave en la relación entre cronotipo y depresión:

✅ Calidad del sueño. Se encontró que los cronotipos vespertinos tenían una calidad de sueño significativamente peor, lo que es consistente con investigaciones previas. La tendencia a acostarse tarde suele entrar en conflicto con los horarios académicos y laborales, y esto genera una acumulación de deuda de sueño y mayor somnolencia diurna. Está demostrado que la falta de sueño de calidad es un fuerte predictor de depresión, ya que afecta la regulación emocional y aumenta la tendencia a la rumiación.

✅ Mindfulness. La atención plena se ha identificado como un factor protector contra la depresión, al ayudar a las personas a gestionar sus emociones y reducir la rumiación. En este estudio, el equipo de Evans observó que los cronotipos vespertinos tenían niveles significativamente más bajos de mindfulness, particularmente en la faceta de actuar con conciencia, esto es, la capacidad de estar presente y consciente en el momento sin dejarse llevar por pensamientos automáticos. Investigaciones previas han demostrado que este aspecto de la atención plena es clave para mejorar la regulación emocional y reducir la probabilidad de desarrollar síntomas depresivos.

✅ Consumo de alcohol. Los participantes búhos bebían más alcohol que los matutinos, lo que concuerda con estudios anteriores que indican que las personas que se acuestan tarde tienen más probabilidades de consumir alcohol. No obstante, un hallazgo sorprendente fue que el consumo de alcohol en esta muestra no tuvo un efecto negativo sobre la depresión. En algunos casos, la ingesta de alcohol en contextos sociales podría estar asociado con un mayor apoyo social, lo que podría tener un impacto positivo en la salud mental de algunos jóvenes. Sin embargo, es necesario investigar más a fondo este aspecto, ya que el consumo excesivo de alcohol puede tener consecuencias negativas a largo plazo.

Los autores del trabajo coinciden en afirmar que fomentar la atención plena, en particular la capacidad de actuar con conciencia, podría ser una estrategia clave en los programas de bienestar mental dirigidos a jóvenes adultos. Foto: Windows

Limitaciones del estudio y futuras implicaciones

El diseño del estudio fue transversal, lo que significa que los datos se recolectaron en un solo punto en el tiempo, por lo que no se puede establecer una relación causal definitiva entre los factores analizados y la depresión. Además, al basarse en datos autoinformados, existe el riesgo de sesgos en la respuesta de los participantes.

Otro aspecto a considerar es que la muestra consistió únicamente en estudiantes universitarios, por lo que los resultados podrían no ser generalizables a otras edades o poblaciones.

A pesar de estas limitaciones, los hallazgos tienen importantes implicaciones para la prevención y tratamiento de la depresión en jóvenes adultos. Dado que muchos de estos presentan patrones de sueño vespertino y enfrentan problemas de salud mental, los resultados del estudio sugieren que intervenciones enfocadas en mejorar la calidad del sueño, promover el mindfulness y gestionar el consumo de alcohol podrían reducir el riesgo de depresión en esta población.

Fomentar la atención plena

Los autores coinciden en afirmar que fomentar la atención plena, en particular la capacidad de actuar con conciencia, podría ser una estrategia clave en los programas de bienestar mental dirigidos a jóvenes adultos. Asimismo, mejorar la higiene del sueño y reducir la acumulación de deuda de sueño podrían ser objetivos prioritarios en futuras intervenciones.

Este estudio confirma que los búhos tienen un mayor riesgo de experimentar síntomas depresivos, y que esta relación se explica en gran parte por la mala calidad del sueño, los bajos niveles de mindfulness y el consumo de alcohol. Al comprender estos factores, se pueden desarrollar estrategias de intervención más efectivas para abordar la salud mental en jóvenes adultos, un grupo demográfico particularmente vulnerable.

Como señalan los autores: «Con tantos jóvenes experimentando problemas de salud mental, estos hallazgos son particularmente importantes. Dado que muchos jóvenes tienden a quedarse despiertos hasta tarde, los resultados sugieren cómo podrían implementarse intervenciones para reducir su riesgo de depresión»

Este estudio refuerza la importancia de un enfoque integral para la salud mental, abordando factores como el sueño, la atención plena y el estilo de vida, con el fin de reducir la incidencia de la depresión en la juventud.

  • Fuente: Gulin Yatagan Sevim, Tina Yuet Law, Simon L. Evans. Mindfulness mediates the association between chronotype and depressive symptoms in young adults. PLoS One (2025). DOI: https://doi.org/10.1371/journal.pone.0319915

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