“La tostadora o un lugar llamado Cornualles”, en la Feria del Libro de Madrid
El pasado miércoles 12 de junio, Cristina García-Tornel y Enrique Coperías estuvieron en la madrileña Feria del Libro firmando ejemplares de su nueva obra “La tostadora o un lugar llamado Cornualles”, una tragicomedia que aborda la importancia de vivir la vejez con dignidad. En especial, cuando irrumpe la demencia en la tercera edad.
Por RexMolón Producciones
Cristina García-Tornel y Enrique Coperías son los autores de La tostadora o un lugar llamado Cornualles, una obra de teatro basada en experiencias y hechos reales que aborda con cariño y respeto las etapas iniciales del alzhéimer, una enfermedad neurodegenerativa progresiva que afecta principalmente a personas mayores, aunque puede aparecer también en personas más jóvenes, y que trastoca la vida de los afectados y su entorno.
“El alzhéimer no solo impacta a quienes lo padecen, sino también a sus familiares y seres queridos de maneras profundas y a menudo desafiantes —dice García-Tornel—. Ver el declive de un ser querido puede ser profundamente doloroso y angustiante. La progresión impredecible de la enfermedad puede generar ansiedad y miedo sobre el futuro”.
En La tostadora o un lugar llamado Cornualles, publicada por la editorial especializada en teatro Éride, los autores plantean cómo el deterioro en la memoria, el pensamiento y la capacidad de realizar las tareas diarias afectan no solo al enfermo, sino también a sus cuidadores. “Es una enfermedad difícil de comprender. Casi nadie conoce la auténtica dimensión de la demencia hasta que entra sus vidas, ya sea de forma directa o indirecta —continúa Coperías—. Creemos que entender el alzhéimer puede ayudar a manejar mejor sus desafíos y prepararse para cambios futuros. Es lo que hemos intentado reflejar en nuestra tragicomedia”.
El desafío que supone vivir la tercera edad con dignidad.
García-Tornel y Coperías también exploran el desafío que supone vivir la tercera edad con dignidad, el miedo de las personas mayores a no poder valerse por sí mismas y depender de otras para realizar tareas cotidianas; el temor a desarrollar enfermedades crónicas y dolorosas o sufrir discapacidades físicas que cercenen su autonomía; o el pavor a no tener suficientes recursos financieros para cubrir las necesidades básicas y los gastos médicos.
“Aunque la muerte es un miedo universal, en la vejez el miedo a morir suele cobrar más relevancia —sentencia García-Tornel durante la firma de libros en la 83.ª Feria del Libro de Madrid, que se celebra del 31 de mayo al 16 de junio del 2024 en el Parque de El Retiro de Madrid. Y continúa—: En la obra, uno de nuestros personajes aspira a ser inmortal, mientras que otro se plantea el sentido que tiene alargar la vida artificialmente si esta no es de calidad”.
En palabras de los autores, escribir una tragicomedia sobre el alzhéimer fue un desafío. Este género literario permite explorar la seriedad y la profundidad emocional de la enfermedad, y hace posible incorporar elementos cómicos que pueden aliviar la tensión y proporcionar una perspectiva más humana y accesible. “Aunque es una tragicomedia, incluimos momentos que permiten a los personajes y al público reflexionar sobre la seriedad de la demencia”, explica García-Tornel, que insiste en que todas las situaciones aparentemente cómicas, sarcásticas o chocantes están recogidas desde la experiencia vivida por los autores con familiares afectados por dos tipos de demencia.
Momentos de alegría, amor y conexión.
“Chema y Jaime, que padecen demencia, tienen momentos de claridad. Estos instantes son tanto trágicos como cómicos, y llenos de emotividad— explica Coperías. Y continúa: Cristina y yo hemos tratado en todo momento de desarrollar la trama con sensibilidad y respeto, equilibrando el humor y las situaciones agridulces con una representación honesta y compasiva de la enfermedad”.
A través de los dos matrimonios de ancianos, que han acordado encarar juntos el otoño de sus vidas, para apoyarse los unos en los otros en los momentos de dificultad, se muestran las múltiples facetas de la enfermerdad de Alzheimer, no solo los desafíos, sino también los momentos de alegría, amor y conexión que persisten.
“El siguiente paso es poder representar la obra en un teatro, que cuatro grandes actores den vida a los Menéndez y los García, los dos matrimonios octogenarios que batallan por tener el control de sus vidas”, concluye García-Tornel. ◾️