La paranoia puede ser, en parte, un problema visual
Las personas con tendencias paranoicas y pensamiento teleológico tienen más dificultades para identificar patrones visuales correctamente, según un nuevo estudio. Este hallazgo podrían facilita la detección de trastornos como la esquizofrenia mediante pruebas sencillas.
Por Enrique Coperías
¿Podrían convicciones complejas, como la paranoia, tener su origen en algo tan fundamental como la percepción visual? Un nuevo estudio realizado por la Universidad de Yale sugiere que sí.
En una tarea de percepción visual, los participantes debían determinar si un punto en movimiento estaba persiguiendo a otro. Los resultados mostraron que las personas con una mayor predisposición al pensamiento paranoico —la creencia de que otros intentan dañarlas— y al pensamiento teleológico —la tendencia a atribuir un propósito o significado excesivo a los eventos— obtuvieron un rendimiento inferior en comparación con los demás.
Estas personas afirmaban, con mayor frecuencia y seguridad, que un punto perseguía al otro cuando, en realidad, no era así.
Los hallazgos, publicados en la revista Communications Psychology, sugieren que en el futuro podría ser posible detectar trastornos como la esquizofrenia mediante pruebas visuales sencillas.
Percepciones negativas vs. interpretaciones positivas
«Nos interesa comprender en profundidad cómo se organiza la mente —explica Philip Corlett, autor principal del estudio, profesor de Psiquiatría en la Facultad de Medicina de Yale y miembro del Instituto Wu Tsai. Y añade—: La percepción de comportamientos intencionados, como la persecución, suele considerarse una experiencia de alto nivel en el cerebro, que requiere razonamiento y deliberación. En este estudio, observamos estos fenómenos en un nivel más básico, la visión, lo cual resulta fascinante y tiene implicaciones importantes para entender trastornos como la esquizofrenia».
La paranoia y el pensamiento teleológico comparten la característica de ser atribuciones erróneas de intención. Sin embargo, mientras que la paranoia implica percepciones negativas, el pensamiento teleológico suele asociarse a interpretaciones positivas. Ambos patrones están vinculados a la psicosis y la esquizofrenia.
Corlett añade que las alucinaciones, también relacionadas con la psicosis, suelen involucrar a otras personas, lo que sugiere que existe un componente social en estas percepciones visuales distorsionadas.
Persiguiendo a un punto
«Nos preguntamos si podría existir algún aspecto de la percepción social —o su distorsión, lo que llamamos alucinación social— que pudiéramos medir y relacionar con los síntomas de la psicosis», comenta el investigador en una nota de prensa de la Universidad de Yale.
En la tarea experimental, los participantes observaban puntos en movimiento en una pantalla. En algunos casos, un punto perseguía a otro, mientras que en otros no había ninguna persecución. Los participantes debían indicar si percibían una persecución o no.
Los resultados mostraron que las personas con mayores niveles de paranoia y pensamiento teleológico —evaluados mediante cuestionarios— eran más propensas a afirmar con total seguridad que un punto perseguía a otro, incluso cuando no era cierto. Es decir, percibían una interacción social inexistente.
En experimentos adicionales, los participantes debían identificar qué punto perseguía y cuál era el perseguido. En esta fase, los patrones de paranoia y pensamiento teleológico comenzaron a mostrar diferencias significativas entre sí.
«Las personas con paranoia mostraron una mayor dificultad para identificar qué punto estaba siendo perseguido», explicó Santiago Castiello, autor principal del estudio e investigador postdoctoral en el laboratorio de Corlett. «Por otro lado, aquellas con un alto grado de pensamiento teleológico tenían más problemas para determinar qué punto realizaba la persecución».
Cómo el cerebro genera los síntomas psicóticos
Estas diferencias entre los dos tipos de creencias subrayan que son fenómenos distintos, lo cual podría tener importantes implicaciones para el diagnóstico y el tratamiento, señalan los investigadores. Además, la conexión con la percepción visual podría cambiar nuestra comprensión de cómo el cerebro genera los síntomas psicóticos.
«Muy pocas personas con ceguera congénita desarrollan esquizofrenia —afirma Castiello. Y añade—: Descubrir estas alucinaciones sociales en la visión me lleva a preguntarme si la esquizofrenia surge, en parte, debido a errores en la manera en que las personas interpretan el mundo visual».
Aunque estos hallazgos aún no tienen aplicaciones terapéuticas inmediatas, una comprensión más profunda de estas creencias podría contribuir al desarrollo de tratamientos farmacológicos y a una mejor evaluación del riesgo de psicosis.
«Actualmente estamos explorando si es posible desarrollar pruebas visuales rápidas que puedan predecir el riesgo de psicosis —avanza Corlett. Y concluye—: «Quizá una tarea perceptiva sencilla pueda ayudarnos a identificar a tiempo a las personas que podrían beneficiarse de hablar con un profesional clínico».▪️
Información facilitada por la Universidad de Yale
Fuente: Castiello, S., Ongchoco, J.D.K., van Buren, B. et al. Paranoid and teleological thinking give rise to distinct social hallucinations in vision. Commun Psychol 2, 117 (2024). https://doi.org/10.1038/s44271-024-00163-9