El páncreas protege al cerebro del alzhéimer
Científicos descubren una proteína del páncreas que podría frenar el alzhéimer y abrir nuevas esperanzas terapéuticas para el tratamiento de esta enfermedad neurodegenerativa, especialmente en personas con diabetes.
Por Enrique Coperías
Las células del páncreas, más conocidas por su papel en la regulación de la glucosa, podrían tener una capacidad inesperada: producir una proteína que proteja al cerebro de la enfermedad de Alzheimer. Esta enfermedad neurodegenerativa, que se caracteriza por un progresivo deterioro cognitivo y la formación de placas de β-amiloide en el cerebro, afecta a millones de personas a nivel global.
En los pacientes con alzheimer, la proteína β-amiloide se acumula y se agrupa para formar placas enmarañadas que contribuyen a la muerte neuronal.
Lo interesante de la nueva investigación es que los diabéticos tienen un mayor riesgo de desarrollar alzhéimer, lo que sugiere una posible conexión entre las células pancreáticas alteradas en la diabetes, específicamente las células β, y la aparición de esta enfermedad.
Una extraña conexión páncreas-alzhéimer
Recordemos que las células β del páncreas son un tipo de célula ubicada en los islotes de Langerhans encargadas de producir y secretar insulina, una hormona clave para regular los niveles de glucosa en la sangre. Estas células desempeñan un papel fundamental en el metabolismo, y ayuda al cuerpo a mantener el equilibrio adecuado de azúcar en la sangre.
En relación al posible vínculo entre las células β y la aparición de esta demencia, los tratamientos convencionales, como los suplementos de insulina, no parecen tener el mismo impacto en la progresión del alzhéimer, lo que sugiere que el vínculo entre la diabetes y esta enfermedad podría involucrar otros mecanismos desconocidos.
Un reciente estudio liderado por Toru Hosoi y su equipo de la Sanyo-Onoda City University, en Japón, ha planteado una hipótesis intrigante: las células β pancreáticas podrían secretar un factor neuroprotector, distinto de la insulina, que podría prevenir la toxicidad inducida por la β-amiloide en las células neuronales.
El papel de las células β pancreáticas en la neuroprotección
Este factor, identificado como el factor de crecimiento de fibroblastos 23 (FGF23), es una proteína endocrina que parece jugar un papel clave en la protección neuronal frente a la toxicidad de la β-amiloide. La investigación mostró que, al tratar células neuronales con este factor, se reducía significativamente la muerte celular inducida por la proteína β-amiloide, lo que abre nuevas posibilidades para el tratamiento de esta devastadora enfermedad, que, con el tiempo, destruyen las células nerviosas y dañan el cerebro.
Este desaguisado neurológico generalmente conduce al deterioro de la función cognitiva, es decir, la capacidad para procesar el pensamiento, más allá de lo que podría considerarse una consecuencia habitual del envejecimiento biológico.
Para estudiar esta posible interacción, el equipo de Hosoi cultivó células β pancreáticas de ratón y expuso a células neuronales tratadas con β-miloide al líquido proveniente de estas células β. Los resultados fueron sorprendentes: el líquido de cultivo de las células β pancreáticas detuvo eficazmente la muerte neuronal inducida por el amiloide-β.
Un proceso esencial para la supervivencia celular
Este hallazgo sugiere que existe un factor secreto de las células β que podría mitigar la toxicidad de la β-amiloide, factor que, según los investigadores, podría ser el FGF23.
Los investigadores también encontraron que, al tratar las células neuronales con FGF23, se incrementaba la actividad de traducción de proteínas en las células, un proceso esencial para la supervivencia celular. Este hallazgo sugiere que FGF23 podría ayudar a mantener la homeostasis de los componentes ribosómicos en las neuronas, lo cual es crucial para evitar la degeneración neuronal.
De hecho, los ribosomas —estructuras celulares responsables de sintetizar proteínas a partir de la información genética contenida en el ARN mensajero— en las neuronas son fundamentales para su funcionamiento, y la disfunción de estos componentes ha sido asociada a enfermedades neurodegenerativas, como el alzhéimer.
¿Una nueva estrategia para combatir el alzhéimer?
Además, los investigadores confirmaron que el FGF23 no solo actuaba de forma neuroprotectora al inhibir la muerte neuronal, sino que también promovía la actividad translacional en las células neuronales, una función vital para su supervivencia. Esto sugiere que el FGF23 podría desempeñar un papel en la restauración de la función neuronal deteriorada por la acumulación de β-amiloide, lo que abre nuevas vías para la investigación de terapias neuroprotectoras derivadas de las células pancreáticas.
Este descubrimiento es particularmente importante porque plantea la posibilidad de que la interacción entre las células del páncreas y el cerebro pueda ser más significativa de lo que se pensaba. Tradicionalmente, el enfoque de tratamiento del alzhéimer se ha centrado en factores derivados del cerebro, como el factor neurotrófico derivado del cerebro (BDNF) y el factor glial de la línea celular (GDNF), que se sabe que tienen efectos protectores sobre las neuronas.
Sin embargo, el nuevo enfoque de considerar factores provenientes de órganos periféricos, como el páncreas, ofrece una nueva perspectiva sobre cómo las alteraciones metabólicas y hormonales, como las que ocurren en la diabetes, pueden influir en la neurodegeneración.
El FGF23, al ser secretado por las células β del páncreas, podría actuar no solo como un regulador del metabolismo óseo y mineral, sino también como un protector de las células cerebrales. Este enfoque amplía el horizonte de posibles tratamientos para la enfermedad de Alzheimer, considerando no solo los factores neuronales, sino también los periféricos, lo que podría ofrecer una forma más integral de combatir esta enfermedad devastadora.
Sin embargo, aunque los resultados son prometedores, se necesita más investigación para comprender completamente cómo el FGF23 y otros factores derivados del páncreas pueden influir en la prevención o tratamiento del alzhéimer. Los estudios adicionales que examinen la interacción entre la función pancreática, la diabetes y la neurodegeneración serán fundamentales para validar si este enfoque puede traducirse en terapias efectivas para los pacientes con la enfermedad de Alzheimer. ▪️
Información facilitada por PNAS Nexus
Fuente: Kyosuke Yazawa, Mieko Nakashima, Tadashi Nakagawa, Yuhki Yanase, Yukari Yoda, Koichiro Ozawa, Toru Hosoi. Pancreatic β cell-secreted factor FGF23 attenuates Alzheimer's disease-related amyloid β-induced neuronal death. PNAS Nexus (2025). DOI: https://doi.org/10.1093/pnasnexus/pgae542