El glaciar del «fin del mundo» de la Antártida se dirige hacia un colapso catastrófico

El vasto glaciar Thwaites de la Antártida, que desemboca en el mar de Amundsen, se encamina hacia un final trágico que vendrá de la mano de un peligroso aumento del nivel del mar, según una investigación que ha durado seis años.

Por la International Thwaites Glacier Collaboration

Las mediciones satelitales y modelos de computadora realizados en Thwaites ya habían determinado que este glaciar se derrite gradualmente. Ahora, los científicos advierten de que el proceso se ha acelerado.

Las mediciones satelitales y modelos de computadora realizados en Thwaites ya habían determinado que este glaciar se derrite gradualmente. Ahora, los científicos advierten de que el proceso se ha acelerado. Crédito: International Thwaites Glacier Collaboration

Una vasta área del indlandsis o casquete polar de la Antártida continúa retrocediendo mientras un grupo de científicos del Reino Unido y Estados Unidos revelan nuevos hallazgos sobre cómo y cuándo podría avanzar repentinamente hacia el colapso.

Desde 2018, los investigadores han descubierto un entorno complejo y rápidamente cambiante en el remoto glaciar Thwaites, en la Antártida Occidental. Científicos del Reino Unido y Estados Unidos se han reunido en el British Antarctic Survey (BAS) en Cambridge para discutir sus observaciones y resultados del estudio.

Antes del inicio del proyecto, bautizado como Colaboración Internacional del Glaciar Thwaites (ITGC), se sabía muy poco sobre los mecanismos que controlan el retroceso de este enorme glaciar, uno de los mayores y más rápidamente cambiantes del mundo. Si se derrumbara por completo, el nivel del mar subiría 65 cm.

En algunos puntos tiene más de dos kilómetros de es espesor

El glaciar Thwaites, apodado como el glaciar del fin del mundo, ocupa una superficie equivalente a la isla de Gran Bretaña o al estado norteamericano de Florida, y en algunos puntos tiene más de dos kilómetros de espesor. El volumen de hielo que fluye hacia el mar desde Thwaites y sus glaciares vecinos se ha duplicado desde la década de 1990 hasta la de 2010, y la región más amplia, llamada Amundsen Sea Embayment, es responsable del 8% de la tasa actual de aumento global del nivel del mar, de 4,6 mm al año.

La misión del ITGC es comprender los procesos físicos críticos que controlan el glaciar en el clima actual y durante los últimos miles de años, y elaborar una predicción más fiable de cómo cambiará el glaciar en el futuro y por qué.

«Thwaites ha estado retrocediendo durante más de ochenta años, y este proceso se ha acelerado considerablemente en los últimos treinta años —dice Rob Larter, de la Coordinación Científica del ITGC y geofísico marino del British Antarctic Survey. Y añade—: Nuestros hallazgos indican que va a retroceder más y más rápido».

La geofísica marina Kelly Hogan observa núcleos de sedimentos marinos que permiten el estudio del estado del glaciar Thwaites.

La geofísica marina Kelly Hogan observa núcleos de sedimentos marinos que permiten el estudio del estado del glaciar Thwaites. Cortesía: Linda Welzenbach

Un aumento del nivel del mar que afectará a millones de personas

El trabajo del ITGC, que comenzó hace seis años, está tratando de predecir el ritmo y la magnitud de los continuos aumentos del nivel del mar que tendrán un enorme impacto en los cientos de millones de personas que viven en las costas desde Bangladesh hasta las islas bajas del Pacífico, desde Nueva York hasta Londres.

«Hay un consenso de que el retroceso del glaciar Thwaites se acelerará en algún momento del próximo siglo —explica Larter. Y continúa—: Sin embargo, también existe la preocupación de que los procesos adicionales revelados por estudios recientes, que aún no están lo suficientemente bien estudiados como para ser incorporados en modelos a gran escala, podrían hacer que el retroceso se acelere más pronto que tarde».

Los resultados sugieren que el glaciar Thwaites y gran parte de la capa de hielo de la Antártida Occidental podrían desaparecer en el siglo XXIII. El glaciar Thwaites es excepcionalmente vulnerable, porque su hielo descansa sobre un lecho muy por debajo del nivel del mar que desciende hacia el corazón de la Antártida Occidental.

El rompehielos Nathaniel B Palmer navega en aguas antárticas; a bordo, viajan científicos que están estudiando el glaciar Thwaites, una piedra angular de la capa de hielo de la Antártida Occidental. Cortesía:  Rob Larter / BAS.

Utilizando tecnología avanzada, como robots submarinos, nuevas técnicas de prospección y nuevos enfoques para el flujo de hielo y el modelado de fracturas, los científicos han obtenido nuevos conocimientos sobre estos procesos. Esto ha mejorado el rendimiento de los modelos informáticos predictivos, pero aún queda mucho por entender sobre el futuro del glaciar.

El colosal Thwaites, de aproximadamente 120 km de diámetro, es el glaciar más ancho del planeta. También es una piedra angular de la capa de hielo de la Antártida Occidental, gran parte de la cual se encuentra en un lecho por debajo del nivel del mar, y elevaría el nivel del mar en 3,3 metros si se derritiera todo.

Según el Ted Scambos, coordinador científico estadounidense del ITGC y glaciólogo de la Universidad de Colorado, en Estados Unidos, «es preocupante que los últimos modelos informáticos prevean una pérdida continua de hielo que se acelerará a lo largo del siglo XXII y podría provocar un colapso generalizado de la capa de hielo de la Antártida Occidental en el XXIII». Y añade: «Una intervención climática inmediata y sostenida tendrá un efecto positivo, pero retardado, sobre todo en la moderación del aporte de agua cálida de las profundidades oceánicas, que es el principal motor del retroceso».

Aún podemos controlar la rapidez con que Thwaites pierde masa., asegura con cierto optimismo el equipo de investigación delITGC.▪️

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