El alzhémier destruye el cerebro en dos fases

Un estudio de mapeo cerebral revela qué tipos de células son las primeras en verse perjudicadas por esta enfermedad neurodegenerativa.

Por Enrique Coperías

La enfermedad de Alzheimer es la forma más común de demencia y puede representar entre un 60% y un 70% de los casos. Esta demencia es un trastorno cerebral que destruye lentamente la memoria y la capacidad de pensar y, con el tiempo, la habilidad de llevar a cabo hasta las tareas más sencillas. Imagen generada con Copilot

La enfermedad de Alzheimer puede dañar el cerebro en dos fases distintas, según una nueva investigación financiada por los Institutos Nacionales de Salud (NIH) de Estados Unidos que se ha valido de unas sofisticadas herramientas de cartografía cerebral.

Según los investigadores que han descubierto este aspecto tan novedoso de la enfermedad, la primera fase, la temprana, se produce lenta y silenciosamente, antes de que las personas experimenten problemas de memoria. Solo daña unos pocos tipos de células vulnerables.

En cambio, la segunda fase, la tardía, causa daños más destructivos, y coincide con la aparición de los síntomas y la rápida acumulación de placas de proteína β-amiloide, ovillos de proteína tau y otras características propias del alzhéimer.

Daños antes de los síntomas

«Uno de los desafíos para diagnosticar y tratar la enfermedad de Alzheimer es que gran parte del daño al cerebro ocurre mucho antes de que aparezcan los síntomas —advierte el doctor Richard J. Hodes, director del Instituto Nacional sobre el Envejecimiento de los NIH. Y añade—: La capacidad de detectar estos cambios tempranos significa que, por primera vez, podemos ver lo que le está sucediendo al cerebro de una persona durante los primeros períodos de la enfermedad».

En palabras del doctor Hodes, «los resultados alteran fundamentalmente la comprensión que tienen los científicos sobre cómo el alzhéimer daña el cerebro y cómo guiarán el desarrollo de nuevos tratamientos para este trastorno devastador».

Los científicos de los NIH analizaron los cerebros de 84 personas y los resultados, publicados en la revista Nature Neuroscience, sugieren que el daño a un tipo de célula, llamada neurona inhibidora, durante la fase inicial del alzhéimer puede desencadenar los problemas en los circuitos neuronales que subyacen a la enfermedad.

Afectada una parte del cerebro que controla el lenguaje, la memoria y la visión

Además, el estudio ha confirmado confirma hallazgos anteriores sobre cómo el alzhéimer daña el cerebro y ha permitido identificar muchos cambios nuevos que pueden producirse durante la enfermedad, que causa problemas con la memoria, el pensamiento y el comportamiento..

En concreto, los científicos utilizaron herramientas avanzadas de análisis genético para estudiar las células de la circunvolución temporal media, una parte del cerebro que controla el lenguaje, la memoria y la visión. Se ha demostrado que esta circunvolución es vulnerable a muchos de los cambios que tradicionalmente se observan durante la enfermedad de Alzheimer.

También es una región cerebral que los investigadores han cartografiado minuciosamente para los donantes de control. Al comparar los datos de los donantes de control con los de las personas que padecían alzhéimer, los científicos crearon una cronología genética y celular de lo que ocurre a lo largo de la enfermedad.

Tradicionalmente, los estudios han sugerido que el daño causado por el alzhéimer se produce en varias fases caracterizadas por niveles crecientes de muerte celular, inflamación y acumulación de proteínas en forma de placas y ovillos.

En cambio, este estudio sugiere que la enfermedad modifica el cerebro en dos fases, y que muchos de los cambios estudiados habitualmente se producen rápido durante la segunda fase. Esto coincide con la aparición de problemas de memoria y otras complicaciones del alzhéimer.

Algunas células del cerebro sufren daños asociados al alzhéimer antes que otras.

Algunas células del cerebro sufren daños asociados al alzhéimer antes que otras. Crédito: The Allen Institute, Seattle

Los investigadores analizaron cerebros que forman parte del Seattle Alzheimer's Disease Brain Cell Atlas, diseñado para crear un mapa muy detallado del daño cerebral que se produce durante la enfermedad. El proyecto fue dirigido por los doctores Mariano I. Gabitto y Kyle J. Travaglini, del Instituto Allen de Seattle.

Los científicos involucrados en la investigación utilizaron herramientas, desarrolladas como parte de la Iniciativa BRAIN (Brain Research Through Advancing Innovative Neurotechnologies) de los NIH —Red de Censos Celulares (BICCN)— para estudiar más de 3,4 millones de células cerebrales de donantes que fallecieron en diversas fases de la enfermedad de Alzheimer. Las muestras de tejido se obtuvieron del estudio Adult Changes in Thought y del Centro de Investigación de la Enfermedad de Alzheimer de la Universidad de Washington.

«Esta investigación demuestra cómo las nuevas y potentes tecnologías proporcionadas por la Iniciativa BRAIN de los NIH están cambiando la forma en que entendemos enfermedades como el Alzheimer. Con estas herramientas, los científicos pudieron detectar los cambios celulares más tempranos en el cerebro para crear una imagen más completa de lo que ocurre a lo largo de toda la enfermedad», dice John Ngai, director de The BRAIN Initiative.

«Los nuevos conocimientos aportados por este estudio —concluye Ngai— pueden ayudar a científicos y desarrolladores de fármacos de todo el mundo a desarrollar diagnósticos y tratamientos dirigidos a etapas específicas del alzhéimer y otras demencias». ▪️

  • Información facilitada por los NIH

  • Fuente: Gabitto, M. I., Travaglini, K. J., Rachleff, V. M. et al. Integrated multimodal cell atlas of Alzheimer’s disease. Nature Neuroscince (2024). DOI: https://doi.org/10.1038/s41593-024-01774-5

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