Descubiertas tres nuevas especies gigantes de canguro

Paleontólogos de Australia describen tres nuevas especies fósiles de canguros gigantes de Australia y Nueva Guinea que arrojan nueva luz sobre la anatomía, la distribución y la forma de saltar de estos marsupiales.

Por la Flinders University

Un esqueleto fósil casi completo del canguro gigante extinto Protemnodon viator del lago Callabonna.

Un esqueleto fósil casi completo del canguro gigante extinto Protemnodon viator, hallado en el lago Callabonna, en el sur de Australia. Al esqueleto le faltan solo algunos huesos de la mano, el pie y la cola. Crédito: Flinders University

Las tres nuevas especies de canguro pertenecen al género extinto Protemnodon, que vivió hace entre 5 millones y 40.000 años, y una de ellas duplica el tamaño del canguro rojo más grande de la actualidad.

La investigación sigue al descubrimiento de múltiples esqueletos fósiles completos de canguros del lago Callabonna, en la árida Australia Meridional, en los años 2013, 2018 y 2019. Estos extraordinarios fósiles permitieron al investigador principal de este investigación, Isaac Kerr, entonces estudiante de doctorado, desentrañar un rompecabezas de casi 150 años en torno a las identidades de las especies de Protemnodon.

El nuevo estudio de la Universidad Flinders revisó todas las especies pertenecientes al citado género, y pone de manifiestp que eran muy diferentes entre sí. Las especies se adaptaron a distintos entornos e incluso saltaron de formas diferentes.

El paleontólogo Isaac Kerr muestra la mandíbula fósil del canguro gigante Protemnodon viator.

El paleontólogo Isaac Kerr muestra la mandíbula fósil del canguro gigante Protemnodon viator (en primer plano) y la mandíbula mucho más pequeña del canguro vivo más grande, el canguro rojo. Crédito: Flinders University

Los protemnodontes se parecían a los canguros grises, pero en general eran más rechonchos y musculosos. Algunas especies pesaban unos 50 kg, mientras que otras eran mucho más grandes que cualquier canguro vivo.

Sin embargo, una de las nuevas especies nombradas en el último estudio, Protemnodon viator, era mucho más grande y pesaba hasta 170 kg. Esto es aproximadamente el doble que los canguros rojos machos más grandes.

Protemnodon viator estaba bien adaptado a su árido hábitat en Australia Central, y vivía en zonas similares a las de los canguros rojos actuales. Era un canguro de extremidades largas que podía saltar con bastante rapidez y eficacia. Su nombre, viator, significa viajero, en latín.

Las primeras especies de Protemnodon fueron descritas en 1874 por el paleontólogo británico Owen.

Los investigadores australianos descubrieron otras dos nuevas especies —Protemnodon mamkurra y Protemnodon dawsonae— al tiempo que revisaron el trabajo de investigadores anteriores, entre ellos el naturalista británico Sir Richard Owen, que acuñó el término dinosaurio en la Inglaterra victoriana.

Las primeras especies de Protemnodon fueron descritas en 1874 por el paleontólogo británico Owen, que siguió el enfoque habitual de la época, esto es, se centró principalmente en los dientes fósiles. Observó ligeras diferencias entre los dientes de sus especímenes y describió seis especies de Protemnodon.

Sucesivos estudios han ido reduciendo algunas de estas primeras descripciones, pero el nuevo estudio de la Universidad Flinders coincide con una de sus especies, el Protemnodon anak. Este primer espécimen descrito, denominado holotipo, aún se conserva en el Museo de Historia Natural de Londres.

Recordemos que un holotipo es un espécimen único utilizado para describir y definir formalmente una nueva especie en biología. Es el ejemplar que se designa como la base de referencia para esa especie en particular. Este espécimen se guarda en un museo o una institución científica y se utiliza como punto de comparación para futuros estudios taxonómicos.

La descripción detallada del holotipo, que incluye sus características físicas y la información sobre su origen, se publica típicamente en una revista científica como parte del proceso de nombramiento y clasificación de la nueva especie.

Impresión artística de la especie fósil recientemente descrita Protemnodon viator y su pariente Protemnodon anak, en comparación a escala con el canguro rojo vivo y el canguro gris oriental. Crédito: Flinders University

Kerr afirma que anteriormente se había sugerido que algunos o todos los Protemnodon eran cuadrúpedos. "Sin embargo, nuestro estudio sugiere que esto solo es cierto para tres o cuatro especies de Protemnodon, que pueden haberse movido como un quokka (Setonix brachyurus) o un canguro rata de hocico largo (Potorous tridactylus), es decir, saltando a veces sobre cuatro patas y otras sobre dos.

"El recién descrito Protemnodon mamkurra es probablemente uno de ellos. Se trata de un canguro grande, pero de huesos gruesos y robustos. Es posible que saltara en contadas ocasiones, quizá sólo cuando se sobresaltaba", dice Kerr. Este afirma que los mejores fósiles de esta especie proceden de la cueva de Green Waterhole, en el sureste de Australia Meridional, en la tierra del pueblo boandik. El nombre de la especie, mamkurra, fue elegido por los ancianos boandik y expertos en lenguas de la Corporación Burrandies. Significa gran canguro.

No es habitual que un solo género de canguro viva en entornos tan variados, afirma Kerr: "Por ejemplo, ahora se sabe que las distintas especies de Protemnodon habitaron en una amplia gama de hábitats, desde la árida AustraliaCentral hasta las montañas boscosas de Tasmania y Nueva Guinea, donde llueve mucho".

Protemnodon dawsonae era un saltarín de velocidad media.

La tercera de las nuevas especies, Protemnodon dawsonae, se conoce a partir de menos fósiles que las otras dos, y es más bien un misterio. Lo más probable es que fuera un saltarín de velocidad media, algo así como un ualabí de pantano.

Su nombre rinde homenaje al trabajo de investigación de la paleontóloga australiana Lyndall Dawson, que estudió la sistemática del canguro y el material fósil de Big Sink" la parte de las cuevas de Wellington, en Nueva Gales del Sur, de donde se conoce principalmente la especie.

Paleontólogos desentierran el esqueleto más grande conocido de Protemnodon viator, un ejemplar apodado Old Gregg'por su gran tamaño y dientes muy desgastados, lo que sugiere una edad avanzada. En primer plano se ve el esqueleto parcial de un Diprotodon, un marsupial gigante extinto. El yacimiento está localizado en la localidad de Tedford, en el lago Callabonna.

Para recopilar datos para el estudio, Kerr visitó las colecciones de catorce museos de cuatro países y estudió, según él, casi todas las piezas de Protemnodon que existen.

"Fotografiamos y escaneamos en 3D más de ochocientos especímenes recogidos en toda Australia y Nueva Guinea, tomamos medidas, los comparamos y los describimos. Fue toda una empresa— confiesa Kerr. Y añade—: Después de cinco años de investigación, 261 páginas y más de 100.000 palabras, me siento muy bien de haberlo publicado por fin. Espero que sirva para que se realicen más estudios sobre el Protemnodon y podamos saber más sobre lo que hacían estos canguros".

En palabras de este paleontólogo, los canguros vivos ya son animales extraordinarios, así que es increíble pensar en lo que podrían haber estado haciendo estos peculiares canguros gigantes.

Aunque los fósiles de Protemnodon son bastante comunes en Australia, históricamente se han encontrado aislados, es decir, como huesos individuales sin el resto del animal. Esto ha dificultado el estudio de los Protemnodon por parte de los paleontólogos en el pasado, ya que es difícil saber cuántas especies había, cómo diferenciarlas y en qué se diferenciaban en tamaño, distribución geográfica, movimientos y adaptaciones a su entorno natural.

DOS SALTARINES MUY DIFERENTES

Reconstrucción del artista australiano Peter Schouten de los canguros extintos Protemnodon anak (en segundo plano) y Protemnodon tumbuna. A pesar de estar estrechamente relacionados, los dos eran animales bastante diferentes en términos de su hábitat y su método de saltar.

Hace unos 40.000 años, todos los Protemnodon se extinguieron en Australia continental, y tal vez persistieron un tiempo más en Nueva Guinea y Tasmania. Esta extinción se produjo a pesar de sus diferencias en tamaño, adaptaciones, hábitats y áreas de distribución geográfica.

Por razones que aún no están claras, no ocurrió lo mismo con muchos animales similares y estrechamente emparentados, como los ualarús —nombre común que se da a tres especies de marsupiales: el ualarú oriental, el ualarú negro y el ualarú antílope — y los canguros grises. Es posible que pronto se encuentre una respuesta a esta pregunta gracias a nuevas investigaciones, ayudadas en parte por este estudio.

"Es estupendo aclarar la identidad de las especies de Protemnodon— afirma Gavin Prideaux, catedrático de Flinders UNiversity y coautor de artículo publicado en la revista Megataxa.

"Los fósiles de este género están muy extendidos y se encuentran con regularidad, pero la mayoría de las veces no hay forma de saber con certeza qué especie se está viendo. Este estudio puede ayudar a los investigadores a sentirse más seguros cuando trabajen con Protemnodon”, concluye Prideaux.

  • Información facilitada por la Flinders University - Adaptación: Enrique Coperías / RexMolón Ediciones

  • Fuente: ISAAC A.R. KERR, AARON B. CAMENS, JACOB D. VAN ZOELEN, TREVOR H. WORTHY, GAVIN J. PRIDEAUX. Systematics and palaeobiology of kangaroos of the late Cenozoic genus Protemnodon (Marsupialia, Macropodidae). Megataxa (2024). DOI: 10.11646/MEGATAXA.11.1.1

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