La actividad física puede protegerte del dolor crónico

Una de las razones del poder analgésico del ejercicio es que aumenta la tolerancia al dolor, afirma un nuevo estudio noruego.

Por Ellen Kathrine Bludd

Hacer ejercicio aplaca el dolor crónico, según un nuevo estudio. Imagen: DALL-E

En 2023, investigadores de la Universidad UiT del Ártico de Noruega, el Hospital Universitario del Norte de Noruega (UNN) y el Instituto Noruego de Salud Pública descubrieron que, entre más de 10.000 adultos, los que eran físicamente activos tenían una mayor tolerancia al dolor que los sedentarios; y cuanto mayor era el nivel de actividad, mayor era el aguante al dolor.

Tras este hallazgo, los investigadores noruegos quisieron saber cómo podía afectar la actividad física a las probabilidades de experimentar dolor crónico varios años después. Y se preguntaron si esto estaba relacionado con el modo en que la actividad física afecta a nuestra capacidad de tolerar el dolor.

«Descubrimos que las personas que eran más activas en su tiempo libre tenían menos probabilidades de sufrir diversos tipos de dolor crónico siete u ocho años después. Por ejemplo, el hecho de ser solo un poco más activo de lo habitual, como pasar de una actividad ligera a una moderada, se asociaba con un riesgo un 5% menor de declarar algún tipo de dolor crónico más adelante», afirma uno de los autores del estudio, el doctor Anders Årnes, de la UIT y la UNN.

En el caso del dolor crónico intenso en varios lugares del cuerpo, el aumento de la actividad física redujo el riesgo de pacecerlo en un 16%.

Tolerancia al dolor medida con frío.

Los investigadores descubrieron que la capacidad de tolerar el dolor desempeñaba un papel en este aparente efecto protector. Esto explica por qué ser activo podía reducir el riesgo de padecer dolor crónico intenso, independientemente de que estuviera o no extendido por todo el cuerpo.

"Esto sugiere que la actividad física aumenta nuestra capacidad de soportar el dolor, y puede ser una de las formas en que la actividad ayuda a reducir el riesgo de dolor crónico intenso", afirma Årnes.

Los investigadores incluyeron en su estudio a casi 7.000 personas, reclutadas a partir del Estudio Tromsø, que lleva décadas recopilando datos sobre la salud y el estilo de vida de la población noruega.

Tras obtener información sobre los hábitos de ejercicio de los participantes durante su tiempo libre, los investigadores examinaron en un laboratorio la capacidad de esas mismas personas para soportar el dolor causado por el frío. Posteriormente, comprobaron si los participantes experimentaban un dolor que duraba tres meses o más, incluidas las molestias localizadas en varias partes del cuerpo o el dolor experimentado como más intenso.

La tolerancia al dolor se prueba sumergiendo la mano en agua helada.

La tolerancia al dolor se prueba sumergiendo la mano del voluntario en agua helada. Foto: STINA BRØNBECH / TROMSØUNDERSØKELSEN

Entre los participantes, el 60% informó de sufrir algún tipo de dolor crónico, pero solo el 5% tenía un dolor intenso en múltiples partes del cuerpo. Pocas personas experimentaron condiciones de dolor más graves. La investigación aparece publicada en la revista PAIN.

En cuanto a hacer ejercicio si ya se padece dolor crónico, Årnes afirma lo siguiente: “En primer lugar, la actividad física no es peligrosa, pero las personas con dolor crónico pueden beneficiarse enormemente de un programa de ejercicio adaptado que les ayude a equilibrar su esfuerzo para que no sea ni demasiado ni demasiado poco. Los profesionales sanitarios con experiencia en el tratamiento del dolor crónico a menudo pueden ayudar en este sentido. Una regla general es que no debe haber un empeoramiento que persista durante un periodo prolongado de tiempo, pero que cabe esperar ciertas reacciones en el tiempo posterior al entrenamiento."

  • Información facilitada por la University of Tromsø – The Arctic University of Norway - Adaptación: Enrique Coperías / RexMolón Ediciones

  • Fuente: Årnes, Anders Pedersena,b,*; Fjeld, Mats Kirkebyc,d; Stigum, Heine; Nielsen, Christopher Sivertc,f; Stubhaug, Audund,f; Johansen, Aslaka,g; Hopstock, Laila Arnesdatterh; Morseth, Bentei; Wilsgaard, Tomb; Steingrímsdóttir, Ólöf Annac. Does pain tolerance mediate the effect of physical activity on chronic pain in the general population? The Tromsø Study. PAIN (2024). DOI: 10.1097/j.pain.0000000000003209

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