Calentamiento del Ártico: los osos polares sufren de dolorosas «bolas de hielo» que se pegan a sus pies

Los poderosos osos polares, símbolos icónicos de los paisajes de nieve y hielo del Ártico, están padeciendo un grave problema con el hielo que se queda pegado en sus patas a causa del clima cambiante en un Ártico que se calienta. Ulceraciones, caída de pelo y heridas sangrantes son algunas de las lesiones observadas por los científicos.

Por Hannah Hickey

Los científicos han planteado tres hipótesis que podrían explicar las heridas en las patas de los osos polares causadas por el hielo que queda pegado en ellas. Una de las hipótesis sugiere que el desencadenante pueden ser los episodios de lluvia sobre nieve. Esto crea nieve húmeda y fangosa que se acumula en las patas del animal y luego, una vez que bajan las temperatura, se congela para formar un sólido. Imagen generada con Copilot

Los osos polares de algunas zonas del Ártico superior están sufriendo acumulaciones de hielo que causan lesiones en las patas de estos plantígrados, al parecer debido a las cambiantes condiciones de la banquisa o hielo marino —una capa de hielo flotante que se forma en las regiones oceánicas polares— de un Ártico que se calienta.

Al examinar la salud de dos poblaciones de osos polares, los investigadores descubrieron laceraciones, pérdida de pelo, acumulación de hielo y ulceraciones cutáneas que afectaban principalmente a las patas de los osos adultos, así como a otras partes del cuerpo. Dos osos tenían bloques de hielo de hasta 30 centímetros de diámetro pegados a las almohadillas de la planta del pie, lo que les causaba cortes profundos y sangrantes y les impedía caminar con normalidad.

El estudio, dirigido por la Universidad de Washington, en Estados Unidos, ha sido publicado en la revista Ecology, y es la primera vez que se documentan este tipo de lesiones en osos polares.

Esta foto muestra las patas traseras de un oso polar sedado temporalmente para ser sometido a un chequeo en el este de Groenlandia en 2022. El oso tiene grandes trozos de hielo congelados en sus patas, que los investigadores eliminaron. Es uno de los dos osos polares que muestran este tipo de acumulación, que parece ser un fenómeno nuevo que afecta a algunos osos polares en el extremo norte. Crédito Kristin Laidre / Universidad de Washington

Los investigadores sugieren varios mecanismos de cómo el cambio de un clima que solía permanecer muy por debajo del punto de congelación a uno con ciclos de congelación y descongelación podría estar causando la acumulación de hielo y lesiones en los osos polares.

«Además de las respuestas anticipadas al cambio climático para los osos polares, habrá otras respuestas inesperadas —dice la autora principal del trabajo Kristin Laidre, científica del Laboratorio de Física Aplicada de la Universidad de Washington y profesora de la Fscuela de Ciencias Acuáticas y Pesqueras en la misma universidad. Y añade—: Por extraño que suene, con el calentamiento climático hay ciclos de congelación y descongelación más frecuentes con más nieve húmeda, y esto conduce a la acumulación de hielo en las patas de los osos polares».

Entre 2012 y 2022, Laidre y el coautor del informe Stephen Atkinson, veterinario de vida silvestre, estudiaron dos poblaciones de osos polares que vivían por encima de los 70 grados de latitud norte y vieron las heridas.

Enormes bolas de hielo pegadas a las patas

En la población de la cuenca de Kane, ubicada entre Canadá y Groenlandia, 31 de los 61 osos polares mostraron evidencia de lesiones relacionadas con el hielo, como parches sin pelo, cortes o cicatrices.

En la segunda población en el este de Groenlandia, 15 de los 124 osos polares tenían traumatismos similares. Dos osos de Groenlandia en lugares separados en 2022 mostraban enormes bolas de hielo pegadas a sus pies.

Nunca lo había visto antes. Los dos osos más afectados no podían correr, ni siquiera caminar con facilidad. Al inmovilizarlos para la investigación, retiramos con mucho cuidado las bolas de hielo. Los trozos de hielo no solo estaban atrapados en el pelo; estaban adheridos a la piel, y al palpar las patas era evidente que los osos tenían dolor
— FuenKristin Laidre, científica del Laboratorio de Física Aplicada de la Universidad de Washington

Los investigadores llevan estudiando estas dos poblaciones de osos polares desde la década de 1990, pero no habían informado antes de este tipo de lesiones. Las consultas con cazadores indígenas de subsistencia de toda la vida y un estudio de la literatura científica sugieren que se trata de un fenómeno reciente.


Los osos polares tienen pequeñas protuberancias en las almohadillas de las patas que ayudan a proporcionar tracción en superficies resbaladizas. Estas protuberancias, que son más grandes que las de las almohadillas de otras especies de osos, como los osos pardos y negros, facilitan que la nieve húmeda se congele en las patas y se acumule. Este problema también afecta a los perros de trineo en el norte.

Los autores plantean tres posibles razones para el aumento de la acumulación de hielo en las patas de los osos polares, todas ellas relacionadas con el calentamiento climático. Una es el aumento de los episodios de lluvia sobre nieve. Esto crea nieve húmeda y fangosa que se acumula en las patas del animal y luego, una vez que bajan las temperatura, se congela para formar un sólido.

Una segunda posibilidad es que el aumento de los periodos cálidos haga que la nieve superficial se derrita y vuelva a congelarse formando una costra dura. Los pesados osos polares atraviesan esta corteza de hielo, cortándose las patas con sus afilados bordes de dicha costra.

La última razón posible es que estas dos poblaciones viven en hielo rápido conectado a la tierra, cerca de donde los glaciares de agua dulce se encuentran con el océano. El calentamiento de estos entornos provoca un adelgazamiento del hielo marino, lo que permite que el agua de mar se filtre en la nieve.

Tres osos polares adultos viajan a través del hielo marino, en el este de Groenlandia.

Tres osos polares adultos viajan a través del hielo marino, en el este de Groenlandia. Los entornos del extremo norte que se habrían mantenido muy por debajo del punto de congelación ahora experimentan ciclos de congelación y descongelación y nieve húmeda debido a un clima más cálido. Crédito: Kristin Laidre / Universidad de Washington

Esta nieve húmeda puede aglomerarse en las patas de los osos y volver a congelarse para formar hielo. Además, a diferencia de otras zonas, los osos polares que viven en los bordes de los glaciares rara vez nadan largas distancias en primavera, lo que ayudaría a descongelar y desprender los trozos de hielo acumulados porque el agua está más caliente que el aire.

Si bien los osos están claramente afectados por la acumulación de hielo, los investigadores son cautelosos con respecto a las conclusiones más amplias sobre la salud de las dos poblaciones.

«Hemos visto estas lesiones relacionadas con el hielo en osos polares individuale —dice Laidre. Y advierte—: Pero dudaría en sacar conclusiones precipitadas sobre cómo esto podría afectarles a nivel poblacional. Realmente no lo sabemos».

Reducir las emisiones de gases de efecto invernadero e intentar limitar el calentamiento climático

Melinda Webster, investigadora del Laboratorio de Física Aplicada de la Universidad de Washington, publicó recientemente un estudio separado que analiza la capa de nieve en el hielo marino del Ártico durante las últimas décadas.

«La superficie del hielo marino del Ártico se está transformando con el cambio climático —dice Webster. Y añade—: El hielo marino tiene menos nieve a finales de primavera y en verano, y la nieve que existe experimenta un deshielo más temprano y episódico y lluvias más frecuentes. Todo esto puede crear unas condiciones de superficie difíciles para los osos polares».

A la pregunta de qué se puede hacer para ayudar a los osos polares, Laidre ofreció una respuesta sencilla: «Podemos reducir las emisiones de gases de efecto invernadero e intentar limitar el calentamiento climático».▪️

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