Contar con los dedos mejora las habilidades matemáticas de los niños

Un nuevo estudio apunta que contar con los dedos ayuda a resolver problemas aritméticos en los niños que asisten a la guardería.

Por Enrique Coperías

Enseñar a los niños pequeños a contar con los dedos podría ayudar a reducir la desigualdad entre los pequeños en matemáticas, según un nuevo estudio. Imagen generada con Copilot

Los profesores de preescolar tienen opiniones diferentes sobre el conteo con los dedos. Algunos consideran que el hecho de que los niños cuenten con los dedos es señal de que tienen dificultades con las matemáticas, mientras que otros asocian su uso a conocimientos numéricos avanzados.

Los defensores de que los niños en edad de ir a la guardería se apoyen en los dedos para contar aseguran que esta práctica además de mejorar su capacidad de cálculo y desarrollar una comprensión más sólida de las relaciones numéricas, puede ayudar a reforzar la memoria y hacer que el aprendizaje sea más interactivo y lúdico, lo cual es crucial en la educación infantil.

Por otro lado aseguran que, con el tiempo, los niños tienden a dejar de contar con los dedos a medida que desarrollan habilidades matemáticas más avanzadas. Esto es parte de su proceso de aprendizaje.

Antes de los ocho años

En un nuevo estudio en Child Development, investigadores de la Universidad de Lausana (Suiza) y de la red colaborativa Lea.fr, en Editions Nathan de París (Francia), exploraron si la estrategia de contar con los dedos puede ayudar a los niños en edad preescolar a resolver problemas aritméticos.

Los adultos rara vez utilizan los dedos para calcular una suma pequeña —por ejemplo, 3+2—, ya que tales comportamientos podrían atribuirse a dificultades patológicas en matemáticas o a deficiencias cognitivas. Sin embargo, los niños pequeños de entre cuatro y seis años que utilizan los dedos para resolver este tipo de problemas son reconocidos como inteligentes, tal vez porque ya han alcanzado el nivel de abstracción que les permite comprender que una cantidad puede representarse por distintos medios.

Solo a partir de los ocho años, el hecho de recurrir a los dedos para resolver problemas de cálculo muy sencillos puede indicar que existen dificultades matemáticas.

Un estudio con 328 niños de entre cinco y seis años de edad

El estudio actual tuvo como objetivo determinar si los niños que no cuentan con los dedos pueden ser entrenados para hacerlo, y si este adriestamiento resultaría en un mejor rendimiento aritmético. El estudio se centró en 328 niños de cinco a seis años de edad —principalmente europeos blancos que vivían en Francia—, y evaluó sus habilidades para resolver problemas simples de suma.

Los niños participantes fueron reclutados a través de sus maestros, quienes participaron voluntariamente en el experimento. Se requirió que los docentes se registraran a través de la red digital pedagógica y colaborativa Lea.fr, que se utilizó para proporcionarles los materiales y los detalles de los procedimientos para implementar el programa de intervención en sus aulas.

El estudio incluyó una prueba previa, una prueba posterior realizada durante dos semanas, una prueba posterior puesta en marcha poco después del final de la capacitación y una prueba posterior diferida.

Contar con los dedos puede mejorar el rendimiento en aritmética

Los resultados muestran un importante aumento del rendimiento entre la prueba previa y la posterior para los niños entrenados que no contaban originalmente con los dedos (del 37% al 77% de respuestas correctas) en comparación con los no usuarios de los dedos del grupo de control (del 40% al 48%).

Estos resultados se reprodujeron en un experimento con un grupo de control activo en lugar de un grupo de control pasivo. Se trata del primer trabajo que demuestra que el rendimiento de los niños en aritmética puede mejorar mediante la enseñanza explícita de una estrategia de conteo con los dedos.

Los investigadores sugieren que, puesto que los pequeños que utilizan los dedos para resolver problemas matemáticos obtienen mejores resultados que los que no lo hacen, la enseñanza de una estrategia de conteo con los dedos podría ayudar a reducir la desigualdad entre los niños en matemáticas.

«Nuestro estudio demuestra que el entrenamiento en el cálculo con los dedos es eficaz para más del 75% de los niños de preescolar», dice  Catherine Thevenot

«Nuestro estudio demuestra que el entrenamiento en el cálculo con los dedos es eficaz para más del 75% de los niños de preescolar», dice Catherine Thevenot, del Instituto de Psicología de la Universidad de Lausan. Imagen generada con Copilot

«Nuestros resultados son muy valiosos porque, por primera vez, ofrecemos una respuesta concreta a la vieja pregunta de si los profesores deberían enseñar explícitamente a los niños a utilizar los dedos para resolver problemas de suma, especialmente a aquellos que no lo hacen de forma natural —dice Catherine Thevenot, del Instituto de Psicología de la Universidad de Lausana, en una entrevista con la Sociedad para la Investigación en Desarrollo Infantil. Y añade—: Nuestro estudio demuestra que el entrenamiento en el cálculo con los dedos es eficaz para más del 75% de los niños de preescolar. El siguiente paso es explorar cómo podemos ayudar al 25% restante de niños que no respondieron tan bien a la intervención.

Sin embargo, en futuras investigaciones habrá que determinar si los peques que cuentan con los dedos lo hacen como un procedimiento aritmético o si entienden algo más profundo sobre los números.

En palabra de Thevenot, «una cuestión importante ahora es determinar si lo que enseñamos a los niños va más allá de un mero procedimiento para resolver los problemas. En otras palabras, queremos saber si nuestra intervención condujo a una comprensión conceptual más profunda de los números, concretamente si los niños comprenden mejor cómo manipular las cantidades representadas por sus dedos».

«De hecho, ya hemos empezado a abordar esta cuestión y los resultados iniciales son muy prometedores. Sin embargo, todavía tenemos que llevar a cabo experimentos adicionales para confirmar que estas mejoras son realmente un resultado directo de nuestro programa de entrenamiento», concluye Thevenot. ▪️

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